DEFENSORÍA DEL PUEBLO CONDENA VIOLENCIA Y VANDALISMO CONTRA LA ALCALDESA DE VINTO Y LLAMA A UNA MESA DE DIÁLOGO PARA PACIFICAR EL PAÍS

La Defensoría del Pueblo condena y repudia la violencia y el vandalismo que fue víctima la alcaldesa del municipio de Vinto en Cochabamba, Patricia Arce, quien la tarde de este martes fue retenida por un grupo de manifestantes, que luego de incendiar el edificio municipal, la agredió físicamente y atentó contra su dignidad, cortándole el cabello y rociándole con pintura y tierra, además de exigir su renuncia.

Esta acción no sólo es condenable porque vulnera los derechos humanos de una mujer, sino porque incurre en actos de discriminación y acoso y violencia política, que son sancionados por la leyes 045, 348 y 243; y peor aún, cuando la dignidad humana está dejando de ser entendida y valorada entre las y los bolivianos.

En ese sentido, demandamos al Ministerio Público a iniciar inmediatamente una investigación minuciosa para identificar a los responsables de estas acciones vandálicas y procesarlos con el mayor rigor de la ley.

La Defensoría del Pueblo expresa nuevamente su rechazo a la extrema violencia con la que se están desarrollando las protestas en el país, que han pasado de ser legitimas a ser transgresoras del marco legal y constitucional.

Considera que el pueblo boliviano ya no puede seguir tolerando este clima de conflictividad, en el que ya no existe tolerancia y ha comenzado a ganar espacios el odio, el racismo, la discriminación y la violencia.

En ese sentido, convoca a las agrupaciones y partidos políticos, al Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade) y a los comités cívicos para instalar una mesa de diálogo que permita buscar y alcanzar la pacificación del país, antes que esta espiral de violencia cobre más víctimas.