PACIENTES RENALES LEVANTAN HUELGA DE HAMBRE EN COBIJA
11 de febrero de 2020
A consecuencia de una llamada a la Delegación Defensorial por parte de un representante de los pacientes renales en el hospital de segundo nivel Roberto Galindo de Cobija, para notificar que los mismos se declaraban en huelga de hambre debido a la falta de insumos y mantenimiento de los equipos de hemodiálisis, que atiende alrededor de 35 personas en la capital, la institución defensorial se contactó con la oficina nacional de la Defensoría del Pueblo para que a través de ella se pueda realizar gestiones ante el Ministerio de Salud y buscar soluciones concretas a este problema recurrente.
De igual manera la Defensoría en Cobija sostuvo reuniones con la Secretaria de Desarrollo Humano del Municipio, Leida Cuellar, para que la autoridad edil tome las medidas administrativas más urgentes para la solución del conflicto.
Producto de ello, en el transcurso del día, el municipio logró un acuerdo con la empresa Biotech Bolivia, encargada del mantenimiento de los equipos médico del hospital, para que se realice la manutención respectiva, además del compromiso de la administración para la provisión de insumos de manera regular e ininterrumpida.
En horas de la tarde la Delegada Defensorial, Nancy Texeira, realizó una visita de verificación y pudo constatar que la huelga de hambre había sido suspendida, y los pacientes ya realizaban su hemodiálisis de manera normal.
El problema se da en el marco de una profunda crisis que atraviesa el hospital de segundo nivel en Cobija, cuyos trabajadores permanecen en estado de emergencia y paro de 72 horas reclamando mejores condiciones laborales, infraestructura, falta de insumos y medicamentos, además de estabilidad laboral.
El municipio, por su parte, aduce que el problema se debe a la falta de recursos de la institución edil debido al cambio de la administración gubernamental que afectó a varias instituciones en el departamento, y que primeramente se estaba atendiendo la cancelación de sueldos y salarios que se adeudan desde la gestión anterior, para, posteriormente, dedicarse al pago de proveedores. De igual manera, reclama la competencia de las instituciones llamadas por ley a la atención y financiamiento de este servicio, que de acuerdo a la norma pertenece a tercer nivel de atención por ser un tratamiento de alta tecnología y complejidad y no así al municipio.